¿Es el rap un tipo de música o es poesía semi-cantada acompañada de una base instrumental?
Este fue el debate que tuve el otro día con os amigos míos de fuera del rollo. Ellos sostenían que TODO el rap suena a lo mismo; a un bombo y caja machacón. Decían que lo mejor que tiene el rap es su mensaje, pero que la parte melódica deja mucho que desear. Yo, evidentemente, no supe (pude) sacarlos de su opinión.
Y es que ¿Qué hacer cuando el 90% del rap que sale en nuestro país suena a lo mismo? ¿Qué hacer cuando lo único que suena en la radio es lo mismo que lleva sonando 10 años? En nuestro país, ocurre algo que no ocurre en (casi) ningún otro país del mundo, y es que tenemos la fea manía de aferrarnos mucho a las costumbres. Y si estamos acostumbrados a que un tema tenga una estructura determinada (una introducción hablada, 8 patrones de rapeo, un estribillo, otros 8 patrones de rapeo y un estribillo final), vamos a acabar haciendo todos los temas de la misma forma.
¿Para qué probar cosas nuevas? ¿Para qué probar tonos en los estribillos si podemos colaborar con la Woyza o Dlux de turno para que canten ellas? Ojo, no seré yo quien se queje de este tipo de colaboraciones, pero sí lo hago de la desidia que se ha instaurado entre los raperos de nuestro país. Como si de la pócima de Space Jam se tratase, los Mc’s españoles siguen repitiendo la misma receta desde hace diez años. Porque sí, porque esa es la que vale, porque los noventa… y todas esas escusas que no le importan una mierda a nadie.
Y sé que muchos me diréis que mis amigos, como el resto del malvado mundo ajeno al rap, tienen muchos prejuicios en contra del Hip Hop. Evidentemente que los tienen. Pero si los tienen es porque el tipo de rap (español) que les llega a ellos es ese tipo de rap machacón. Mis amigos no tienen porqué conocer a Kendrick, a A$AP, el Watch The Throne, a Promoe o a Lauryn Hill. Mis amigos, como el resto del malvado mundo ajeno al rap, conocen a Nach, a Violadores del Verso, al Chojín, a SFDK, y si me apuras mucho, tal vez conozcan a Rayden. Con este panorama cómo les explico yo a mis amigos que no todos suenan a Nach o a Rayden, y que desde Dano o, N-Y, hasta Puto Largo, o Bha, hay “unos pocos” que cuidan la musicalidad de sus temas. Me espera una complicada y ardua tarea por delante.
Todo sería más sencillo si los Mc’s no nos hubiéramos impuesto la etiqueta de “los cantautores del Siglo XXI”. Los “únicos” capaces de traer la verdad universal a este mundo. “El rap no suena en las radios porque no interesa que la gente se culturice”. No, oiga, el rap no suena en las radios porque no le interesa una puta mierda a nadie. Ah, y para culturizarme me leo un libro de Bauman, no me pongo un tema de Charly Efe. Con este tipo de etiquetas, cómo pretendemos que la gente ajena a la cultura Hip Hop no crea que el rap sea sólo mensaje. Y así llevamos 10 años estancados tirando de unos tópicos que empiezan a ser casposos. Os voy a contar un secreto: En una línea de Sabina o Serrat hay más poesía que en el 99% de los discos de rap español (todos juntos), porque en el rap español (casi) ningún MC dice lo que piensa, sólo repite moldes y no se expone en sus temas.
Parece que en España asusta probar nuevas tonalidades en las canciones. En el panorama del rap internacional es común encontrar a MC’s que cuidan la musicalidad de su voz (sobre todo en Francia), que buscan una atmosfera concreta con cada tema y que no tienen miedo a hacer MÚSICA.
Así que si me preguntan, digo que sí, que el rap es música. Claro que es música, pero un tipo de música que sigue en pañales en nuestro país y que no va a sufrir un cambio muy grande debido a que los nuevos chavales que entran ya empiezan con el prejuicio de que la musicalidad es algo secundario dentro del rap. Evidentemente, después tendríamos que entrar a valorar qué entiende por música cada uno (y ahí no creo que lo que suena en los pubs salga muy bien parado), pero ese es otro asunto.
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